Lavarse el pelo
y nada, nada, nada
puede compararse con ese ritual
que es lavarse el pelo.
Ese lavado secado de pelo
Aunque pasa con regularidad
Siempre las toma por sorpresa.
Es un ritual medio japonés
que por algún secreto motivo las relaja.
Al principio o al final de una misteriosa corriente
el reloj dice ahora y ellas van,
a cualquier hora
a meterse en la ducha
y salir después como árabes
con una toalla en la cabeza.
Después leen la última novela estúpida,
miran telenovelas.
Y después llega el rito final
de secarse el pelo y peinarse.
Entonces, con la vida lavada
se sientan y miran la puerta
preguntándose por qué
ese chico sucio y despeinado
está tardando tanto.
They Have Not Seen the Stars: The Collected Poetry of (2001)
Versión patricio grinberg
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